Eurovegas se va sin plan B. Madrid sigue igual

Sheldon Adelson ha dicho basta y ha puesto sobre la mesa unas exigencias inaceptables. 

El Gobierno de Mariano Rajoy ha rechazado hoy día 13 de diciembre por inasumibles las condiciones de Las Vegas Sands. Inasumibles para la legislación española e incluso para la legislación europea.

Eurovegas es, pues, pasado. Quizá el Amazonas que más tinta ha echo correr en los últimos años, ha dicho su última palabra, y parte con rumbo a Asia, Japón o quizá, Corea.

Una inversión que, en la última cifra del consejero delegado Michael Leven de Las Vegas Sands, superaba los 30.000 millones de dólares abandona el proyecto inicial de entrar en Europa vía España y se dirige hacia otros parajes.

Lo sorprendente es que Las Vegas Sands abandona España y se lanza al mercado japonés o coreano sin plan B para negociar dónde asentar la nueva Meca del juego con sus casinos, teatros y centros de convenciones.

Madrid se queda con un palmo muy largo de narices. Los madrileños reciben el enésimo baño de agua helada en esta crisis desatada en 2007 y, lo peor, la salida del túnel se prolonga. Sorpende, también, la paciencia de la ciudadanía.

Sin Juegos Olímpicos. Sin el complejo de Eurovegas. Sin salida a la crisis. Con una deuda municipal por las nubes. Con una deuda de la Comunidad cada vez más pesada. Con unas cifras de paro que no se reducen. Con las familias cada vez más endeudadas, sorprende la paciencia infinita de la ciudadanía.

Es probable que Cristiano Ronaldo no gane el balón de Oro. Quizá el Atlético se las vea con algún ogro inglés o alemán, y se pierdan otras dos briznas de sueño. Pero, el madrileño, pase lo que pase, seguirá igual, al despertar el nuevo día. 

Y algunos, pensando cómo puede negociar para establecerse en Asia el Sr. Adelson y el consejero Leven sin un plan B. Porque la rivalidad coreano-japonesa quizá no sea suficiente para sacar tajada. 

¿Será una lucha del orgullo japonés y coreano a ver quién da más o quién da menos? Las Vegas Sands ha cometido un error estratégico en Madrid al marcharse sin un plan B creíble para el mercado asiático. Y les puede costar caro.