29.9.12

Tuitear o no tuitear ¿Cómo usar tuiter?


Tuitear o no tuitear ¿Cómo usar tuiter?

Mucha teoría corre por internet sobre tuiter. Para unos tuiter es una máquina que exige alimentación permanente. Para otros, una forma de comunicar cosas de alguna importancia.

Quizá el término medio sea el oportuno. El famoso que tiene miles de followers deberá al menos una vez al día hacerse notar, y mejor a una hora concreta; y la forma óptima, con algo personal, e incopiable: por ejemplo, una fotografía de sí mismo o de su trabajo ese día -por algo es famoso, ¿no?-

Si eres un usario medio, piensa y luego tuitea. También se dice "tuiterar." Pienso, luego tuitero. Pero no te preguntes ¿a quién le importa? Porque despertarás el censor que todos llevamos dentro. Si quieres decir algo, adelante. Un tuit es simplemente el canto de un pájaro en la jungla; no te preocupes si no gustas a todo el mundo; o si en mitad del tuiterío nadie se percata de tu pensamiento.

Tuiter funciona como una máquina de autopromoción: muestra lo que haces, lo que lees, añade enlaces a tus periódicos, revistas, o tuiterea a los que sigues. Es lo mejor del tuiter, la palmadita en la espalda que recibe nuestra vanidad. 

Dialoga con tus seguidores, a base de preguntas, o incluso afirmaciones contundentes que despierten y provoquen en tus seguidores respuestas instintivas. 

Puedes preguntar, y mejor aún, tener preparada alguna respuesta para quienes se animen a participar o maticen tu pregunta. Aunque nadie responda, tu pregunta ya es en sí un tuiteo que puede atraer la atención de otros usuarios.

La pregunta / interacción ideal en tuiter es el grito de Tarzán en la jungla: audible por encima del barullo general, y comprensible por todos y que exige atención/respuesta inmediata.

Revisa tus tuits enviados, y procura que sigan una línea discursiva: de este modo tus propios tuits actúan como un panal que atrae seguidores. Y de eso se trata, dar información, y recibir información.

Tuiter debe ser positivo; si tus tuits son negativos, algo no estás haciendo bien. Si has recibido un mal servicio, a tus seguidores les interesará saber cómo has reaccionado: hoja de reclamaciones, corrección del error o del defecto... esto es positivo. Lo positivo atrae; lo negativo, cansa. "Me engañaron, y monté un bronca del mil allí mismo..." ¿A quién le importa?

La figura de Pulgarcito tiende a desaparecer: a nadie le interesa conocer tus rutinas: me levanto, me ducho, desayuno, salgo, tomo el coche o el metro... Solo cuando aporten algo novedoso, por ejemplo, la reacción de cada taxista cuando te devuelve a casa al terminar la jornada de trabajo; o el tipo de viajero que comparte tu vagón: añade novedad, intriga, tuit a tuit, y despierta la curiosidad de los tuiteros.

Tuiterar es un canto a la vanidad: puedes darte pisto en todo momento, nadie te ve. Y en esto supera el viejo adagio de la radio en los campos de fútbol: "El que lo ve, no me oye; el que me oye, no lo ve." 

Tuiter, en fin, y no lo hemos tratado, es la colonización del lenguaje castellano por las medidas de las palabras en inglés -que no son idénticas en castellano-. Pensemos en las medidas de una portería de fútbol. ¿Por qué una portería mide lo que mide? Son medidas inglesas: pies por yardas. Tuiter es igual: meter en una portería inglesa 140 caracteres con una idea cabal, es más fácil que hacerlo en castellano. Los que han traducido, y mucho, te lo confirmamos.

3 comments:

Chespir said...

Vale, te voy a hacer caso pero como de aquí a mañana no tenga 200 follogüers te haré unfollou a tí. Avisao estás.

Altn Zam said...
This comment has been removed by the author.
Altn Zam said...

The world is realy different in different language, but the Spanish language is so ... different :): any strange word is turn into a spanish world. :) hehe.
No sé si he dicho lo que quise decir. :)