El Reino Unido vota hoy. Es una convocatoria extraordinaria pues el partido conservador disponía de mayoría y decidió, no obstante, adelantar las elecciones. La mayoría de los comentaristas hablan de error de cálculo de la primera ministra, May, pero no es así. Subyace un cálculo frío, objetivo.
Theresa May disponía de una mayoría cómoda en el Parlamento. Esta mayoría, sin embargo, se enfrentaba a una decisión histórica que provocará profundos desgarros en el tejido social del Reino Unido. La Crisis del Brexit será visible cuando los 26 países de la Unión Europea se lancen como leones en la negociación. Esta batalla negociadora aportará carnaza interminable para los tabloides británicos, la prensa sensacionalista, y Theresa May se percató de que no podía dejar al Partido Conservador presa de los buitres de los tabloides, precisamente porque la mayoría que respalda a la Priemra Ministra no fue elegida para recibir los ataques de los leones de Europa, y de los buitres del interior.
La Primera Ministra necesitaba una mayoría clara para el Brexit, para la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Los resultados de aquel referéndum 51.9% a favor, y 48,1% en contra dejan un margen muy exiguo para una decisión de envergadura histórica y que marcará más de una generación en la historia venidera.
Votado el Brexit, este se ejecuta. También el Parlamento opinó al respecto. Y la autoridad judicial.
En el plano exterior, la victoria de Donald Trump, un outsider de la política con marcado populismo, fue otra señal para continuar el Brexit. Todos los países de la Unión Europea preparan su artillería negociadora para ejecutar el Brexit. La salida del Reino Unido será un parto con dolor, y se necesita una gran mayoría para acoger y aceptar el resultado (o las consecuencias negativas) de aquella sorprende decisión de junio de 2016.
Con aquella mayoría exigua a favor de la salida de la Unión del 23 de junio de 2016, Theresa May exigió a través de unas elecciones, una demostración suficiente por parte de los ciudadanos del Reino Unido para avalar una decisión histórica. Toda la razón en adelantar las elecciones. Aunque ahora, en el momento de la crítica, no queramos valorar las razones para el adelanto electoral, aquí están: 51,9% y 48,1%. ¡A votar!
Votos a favor de permanecer en la UE: 16,141,241 (48.1%)
Votos a favor de abandonar la UE 17,410,742 (51.9%)
Votantes llamados a las urnas: 46,500,001
Participación: 72.2%
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