Chávez y los Castro están maduros para... el socialismo español

¿Debe apoyar Rubalcaba la versión de la dictadura y sus esbirros? 

¿Debe apoyar la versión de los demócratas sobre el "caso Carromero"?

La marea roja de apoyo a Chávez puede entrar en reflujo y retirarse si se confirman los peores augurios sobre la salud del líder del llamado "socialismo bolivariano."

Hugo Chávez, el presidente de Venezuela, puede ser la gran ocasión de los socialistas españoles para detener la hemorragia de votos hacia la izquierda que sufre el PSOE.  El socialismo español puede encontrar en el más que probable reemplazo de Chávez la ocasión para desplazar las corrientes de voto de opciones comunistas hacia sus propios caladeros de izquierda no radical y volver a postularse como alternativa de gobierno en España.

El más que probable reemplazo de Chávez actuará para los socialistas españoles como un altavoz mediático capaz de cerrar la sangría de votos al radicalismo o dejar la cosas como están: lento retroceso socialista y paulatino avance de otras izquierdas: IU está en su momento más alto o, en Cataluña, ICV en su punto álgido.

La caída de votos del socialismo español ha echo sonar las alarmas: hay comunidades donde se habla de un "tri-partido" de izquierdas, como tres fuerzas IU, UPyD y PSOE (como en la Comunidad de Madrid) que harían imposible una hipotética mayoría socialista en la Comunidad o en el Ayuntamiento; y aún peor, una muy improbable coalición de tres partidos para desplazar al Partido Popular de los salones del poder.

Porque Chávez encubre ahora la siniestra dictadura de los Castro. El heredero no electo de Chávez será Maduro, el vicepresidente. Se supone que continuará su obra, llamada "socialismo bolivariano." Maduro, seguirá aportando el petróleo que mantiene al reducto grupo de los Castro en el poder, y a su amplia maquinaria policial a pleno rendimiento.

En España la izquierda radical y extraparlamentaria aplaude sin pudor ni rubor democrático a los dictadores cubanos. Incluso Cayo Lara, el líder de Izquierda Unida, aplaude la "historia oficial" de los Castro y desprecia a los demócratas de la isla. Ningún país de Europa produce apoyos a la dictadura cubana como España. Mucho menos en los países que conocieron el comunismo.

Chávez, según su mentor, el sociólogo alemán Heinz Dieterich, no está en condiciones de retomar las riendas del poder en Venezuela si sale recuperado de la última ronda de operaciones quirúrgicas a las que ha sido sometido en La Habana. 

Añadamos que los Castro están en condiciones de ser juzgados por crímenes contra la humanidad.

Dos ocasiones en una para que el Partido Socialista Obrero Español marque distancia entre la dictadura y los amigos de los dictadores (muy activos en España). 

Alfredo Pérez Rubalcaba se encuentra con una oportunidad para "recentrar" al socialismo español y canalizar la voluntad democrática en Cuba -y en España- hacia formas políticas propias del siglo XXI

Rubalcaba podría detener la sangría de votos que padecen los socialistas en España y en las elecciones autonómicas en la mayoría de las comunidades, véase Cataluña como último ejemplo.

El primer paso de Rubalcaba debe ser un apoyo explícito a los disidentes cubanos y a quienes luchan por la democracia en Cuba.

Chávez suministra oxígeno a los dictadores de Cuba y mantiene a pleno rendimiento a la policía represora que somete junto con el ejército y los comités de barrio a los ciudadanos de Cuba.

¿Debería Rubalcaba apoyar de manera explícita a los disidentes cubanos? ¿Debería el Partido Socialista Obrero Español ?

En el "caso Carromero" ¿qué socialistas apoyan la versión de la dictadura? ¿Qué socialistas apoyan la versión de los disidentes? ¿Que socialistas españoles están con la familia Payá y frente a los Castro? Oswaldo Payá y Cepero Escalante fallecieron en un "sospechos accidente" según las familias de las víctimcas. Según la dictadura, sus jueces y sus policías, el responsable del accidente fue el conductor del vehículo, Ángel Carromero. ¿De qué lado están los socialistas españoles?

Los Castro caerán. La disidencia mostrará el gulag castrista a todo el mundo. ¿Quién defenderá los campos de exterminio cubanos? ¿Quién defenderá a los torturadores comunistas? ¿Quién podrá dar cobertura mediática o política a los violadores de derechos humanos en Cuba? 

Esta será la argamasa capaz de unir a la izquierda en España bajo la dirección del PSOE. Izquierda desperdigada con la crisis en formaciones fuera del parlamento o acogida en Izquierda Unida, partido de estricta sumisión a la "versión oficial" del caso Carromero.