Madrid Arena y Ana Botella el efecto colateral olvidado: Aznar.

"Vade a bordo, cazzo" Jefe de Guardia al capitán del Costa Concordia Schettino.
-"Vade a 'madrí', Anita..." 
-¿Otra cosa? '¡Venacáp'acá!'
-¿No dijo nada, y cenaron como si nada?

Ana Botella afirma que regresó desde Lisboa para dirigir la crisis, y volvió a las pocas horas a la capital portuguesa para terminar los días del puente de Todos los Santos en un hotel de lujo con su familia. ¿Qué dijo Aznar a su esposa Ana Botella en Lisboa? ¿Vete? ¿Vuelve? ¿Espera?

La primera crisis en la alcaldía ha dejado tocada a la alcaldesa Ana Botella. Es cierto que poco puede hacer un alcalde cuando sus concejales cometen errores. Y en este caso los errores de sus concejales fueron garrafales, de fatales consecuencias. La alcaldesa Ana Botella debe exigir responsabilidades. Hay más, desgraciadamente.

Miguel Ángel Villanueva, vicealcalde y Pedro Calvo, concejal de economía, forman la primera línea que debe responder desde el Ayuntamiento sobre un asunto que costó la vida de cuatro chicas jóvenes. También el responsable policial debe probar que el dispositivo de la policía municipal era el oportuno. Hay más responsabilidades, y más arriba.

También, por su parte, es responsable la empresa, Diviertt. Y su cabeza visible, Miguel Ángel Flores. Es responsable también Kontrol 34 la empresa de seguridad.

Según las pesquisas, Diviertt vendió más localidades de las permitidas, y además no declaró el número real de entradas vendidas como es su obligación -ni al fisco, suponemos-. Además, esta empresa mantenía deudas con Hacienda e incluso con el Ayuntamiento de Madrid. Cuando una empresa está en deuda con Hacienda o la Seguridad Social no puede -por ley- participar en concursos oficiales, ni recibir contratos oficiales. 

A pesar de las deudas, y para asombro de todos, esta empresa, Diviertt, figuraba como entidad de contratación preferente en los documentos del concejal de Hacienda, Pedor Calvo. Huele a Gurtel si es cierto que existen lazos de amistad entre la dirección de Diviertt y algunos concejales.

No sólo Villanueva y Calvo deben aclarar, "caiga quien caiga" (en palabras de la jefa del PP de Madrid, Esperanza Aguirre), su papel en esta trama, donde podemos sospechar cierto "olor a Gurtel" como decíamos. La alcaldesa es también responsable por su gestión de la crisis que incluye su viaje doble del puente de Los Santos a Lisboa "en todo momento pensé en las víctimas" declaró a modo de exculpación el día en que todo el cortejo municipal asistió a la misa de la patrona madrileña, la Almudena, en la Catedral de Madrid, una semana después. 

"Todo el tiempo pensé en las víctimas" dicho por la propia alcaldesa nos lleva a pensar que conversaría del mortal suceso tanto con su círculo más estrecho de colaboradores,  como con sus allegados, su familia y su marido, José María Aznar.

La alcaldesa, Ana Botella, optó por regresar desde Lisboa, para luego volver desde Madrid a la capital portuguesa y proseguir el puente en un hotel de gran lujo. Sabemos que estaba con su familia, ella misma lo dijo. Y esta es la gran duda.

Vada a bordo, cazzo!

En Lisboa, suponemos que la alcaldesa estaba, como ella afirma, con su marido, el ex presidente José María Aznar. ¿Qué dijo el ex presidente a su mujer? ¿Qué comentó a su esposa sobre el tema? "Ana, es mejor que regreses a Madrid." Quizá "Ana, quédate, y deja que se calmen las aguas y los muertos se enfríen..."

Son muchas las dudas. Me viene a la memoria la escena trágica y dramática entre el Jefe de la Guardia Costera de la isla de Giglio y el capitán Schettino con el hundimiento del Costa Concordia en enero de 2012 que costó la vida a 32 pasajeros y tripulantes. 

El jefe de la Guardia Costera ordena al comandante Schettino que regrese al barco, y este se niega con excusas peregrinas. El comandante estalla "vada a bordo, cazzo!" Pero Schettino se resiste a subir al bote, y regresar al barco que se hunde.

¿Fue José María Aznar como el Comandante de la Guardia Costera? ¿Dió su opinión a su esposa sobre esta crisis? Son preguntas que merecen una respuesta, y pronto.

Está en juego más que el prestigio de la alcaldesa, también el de su esposo, el ex presidente del Gobierno con quien pasaba el fin de semana mientras "pensaba todo el tiempo en las víctimas."
"Vade a bordo, cazzo" ¡Vuelve a tu puesto, capullo!